Algunos analistas internacionales están criticando la última gala de los premios Oscar de cine por servir a los intereses políticos propagandísticos de Estados Unidos. Algo que quedó además refrendado por la participación de la primera dama, Michelle Obama, en la entrega del premio a la mejor película que fue para “Argo” una película que narra los hechos de cómo la CIA, con la ayuda de Hollywood, rescató a seis diplomáticos estadounidenses ocultos en la casa del embajador de Canadá en Teherán, durante la revolución iraní en 1979.

Pero además, también triunfa en Hollywood la película sobre cómo se localizó y asesinó al líder de Al Qaeda, Bin Laden.

Las críticas no llegan sólo desde países como Irán, sino desde el mismo Estados Unidos. Nos lo cuenta Fernando Velázquez, del colectivo Pueblos Sin Fronteras, de Radio Pacífica, desde Los Ángeles.