Diversas organizaciones sociales del Estado español y del resto de Europa vienen denunciando desde hace tiempo la vulnerabilidad y desprotección de los menores migrantes no acompañados. Se trata de niños, niñas y adolescentes migrantes que emprenden el proceso migratorio sin referentes adultos, al tiempo que carecen de redes de apoyo social (o que están muy debilitadas) en los países de acogida. Este colectivo está formado por menores de edad, procedentes mayoritariamente de países extracomunitarios en conflicto, agravados por importantes crisis sociales y económicas y/o países con regímenes políticos autoritarios, todos ellos, países caracterizados por una gran inestabilidad. La estancia de estos niños y adolescentes en los países europeos tiene como particularidad fundamental la fragilidad y la vulnerabilidad a la que están expuestos, siendo muchos de ellos receptores de una intensa violencia social y situándolos en una posición de un gran riesgo social.

Profundizamos en esta situación con el siguiente reportaje.