Guerras y conflictos,
Política internacional
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Oriente Medio
14 de febrero de 2012
Las grandes agencias internacionales de información aseguran día sí, día también, de que los muertos en Siria son causados por el régimen de Bashar Al-Assad. El resto de medios, incluidos muchos que se consideran progresistas, replican esos contenidos sin un ápice de espíritu crítico. Sin cuestionar que en un conflicto con sectores fuertemente armados las muertes no pueden ser producidas por un sólo sector.
En estos días todo parece estar orquestado para que las Naciones Unidas aprueben una operación de ocupación al estilo de Libia. Por cierto, Libia, un país que tras el derrocamiento del anterior gobierno nada se habla de democracia, pero los 14 países ocupantes ya controlan el petróleo libio. Estados Unidos incluso ha establecido una base militar en el sur del país. De eso, las agencias y medios no dicen ya nada.
Sin duda, el gobierno sirio de Al-Assad, tiene como todos, luces y sombras. Pero eso no quita para que se ignore que los desertores del ejército que forman el ejército rebelde están siendo formados en Turquía, que periodistas independientes denuncian desde Siria la existencia de escuadrones de la muerte anónimos y ocultos que disparan contra la población civil, una forma de desestabilizar que el periodista estadounidense Webster Tarpley asoció directamente con la CIA, el Mosad y el MI6. Los observadores internacionales dijeron que habían visto civiles muertos, pero que no podían asegurar quiénes eran los autores de esas muertes. Incluso, cuando los medios internacionales sacan muertos en las calles, hablan de que muchos cuerpos no pueden ser rescatados debido a la existencia de francotiradores. Pero dan por supuesto, que esos francotiradores que nadie ve son miembros leales al régimen. Lo que está claro que esos asesinatos están colaborando a crear un rodillo de opinión para que el mundo no dude de quiénes son los buenos y quiénes los malos, y así se justifique una acción militar internacional.
Para el analista internacional canadiense Michel Chossudovsky, lo que realmente hay en Siria es una insurrección armada, apoyada por la OTAN, que está asesinando a civiles para hacer creer que el gobierno es quien está masacrando al pueblo.
Escucha en el siguiente informe las opiniones del analista internacional Michel Chossudovsky y de José Ramón Cervera Grau, miembro de la iniciativa “Ojos para la Paz”.
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